Por Anabel Pomar
Tras una semana de deliberaciones el jurado en el caso Hardeman vs. Monsanto, la segunda demanda en llegar a juicio contra el Roundup por cancerígeno, encontró al Roundup sustancial para provocar cáncer al demandante.
En respuesta al veredicto de hoy, Aimee Wagstaff, abogada del demandante, expresó apenas conocida la noticia: “El Sr. Hardeman se siente complacido de que el jurado sostuviera por unanimidad que el Roundup causó su Linfoma Non Hodgkin. Ahora podemos centrarnos en la evidencia sobre la responsabilidad de Monsanto en la falta de seguridad del Roundup. De las acciones de Monsanto se desprende claramente que no le ha importado ocuparse en solucionar la peligrosidad cancerígena de su producto sino que han centrado sus esfuerzos en manipular a la opinión pública y socavar a cualquiera que plantee preocupaciones genuinas y legítimas sobre el tema. Esperamos presentar esta evidencia ante el jurado y responsabilizar a Monsanto por su mala conducta”.
Esta nueva condena para Monsanto es un duro revés para la compañía ya que es la segunda vez en menos de ocho meses donde es encontrada culpable. Condena además en un proceso bifurcado que fue señalado por organizaciones de consumidores y expertos en leyes como un escenario pensado para favorecer a la compañía. Pese a ello, Monsanto fue condenada nuevamente.
Este veredicto condenatorio es para la fase 1 del juicio. En esta fase ahora completa y que dictaminó que el Roundup produjo cáncer se buscaba dar respuesta a la peligrosidad cancerígena del plaguicida. Al ser unánime la decisión del jurado ahora se procederá a la segunda parte, determinar la responsabilidad de Monsanto al fabricar, distribuir y poner en el mercado el mencionado herbicida.
El juicio de Hardeman procede en dos fases. La primera etapa, donde Monsanto fue hallado culpable, determina si el glifosato es quien produjo el cáncer del demandante. Al encontrar de manera unánime que la respuesta es positiva, es decir, que el Roundup fue sustancial para producir cáncer, se avanza a la segunda fase o etapa, la de enjuiciar la responsabilidad de la empresa en cuanto a no advertir adecuadamente de ese peligro. Esta etapa comienza mañana mismo por la mañana en San Francisco.
El juicio comenzó el pasado 25 de febrero y es el segundo proceso contra Monsanto (ahora propiedad de Bayer) por provocar cáncer – del total de 11.200 demandas confirmadas por la empresa que esperan su turno en corte-. El juicio se desarrolla en San Francisco ante el juez Vince Chhabria y un jurado de seis personas quienes fueron las encargadas de llegar a este veredicto. En ese mismo distrito, hace meses, Dewayne Johnson logró convertirse en el primer enfermo de cáncer al que la justicia le diera la razón concluyendo que el Glifosato fue sustancial para producirle la enfermedad. Misma conclusión a la que arribo el jurado del caso Hardeman.
Hardeman, el segundo paciente oncológico en llegar ante un tribunal de justicia con su caso, vivió por décadas junto a su esposa en el condado de Sonoma, California, en 22 hectáreas de tierra que alguna vez fueron usadas como refugio de animales exóticos. Hoy a sus 70 años, enfermo terminal, recuerda que comenzó a usar los productos Roundup para combatir al roble venenoso y controlar las malezas en su propiedad en 1986. Y así lo hizo en forma continua por casi treinta años. En febrero de 2015, se le diagnosticó un Linfoma Non Hodking de Tipo B, aproximadamente un mes antes de que la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) reclasificara al glifosato, ingrediente clave en Roundup, como un “probable cancerígeno para humanos”.